No fue la intensión ni objeto del análisis, establecer comparaciones de las características motrices del niño(a) dadas por los diferentes autores, mucho menos si tenemos en cuenta que los autores citados proceden de épocas diferentes, no obstante se evidencia en la tabla que no existe homogeneidad en estas caracterizaciones. Debido a esto, sería un error copiar la caracterización descrita por un autor específico, en lugar de estudiar mediante la aplicación de un instrumento diagnóstico las peculiaridades de la motricidad.

La forma es el proceso que implica el movimiento. «La forma es un modo de actuación, un método de trabajo, un diseño de actuación». En ella se incluyen los movimientos, su disposición espaciotemporal y el efecto visual completo producido. La calidad del proceso se indica por medio de términos calificativos que ofrecen una escala cualitativa entre bueno y malo, maduro e inmaduro, experto e inexperto, eficaz e ineficaz o satisfactorio e insatisfactorio. Los términos de calificación positiva implican economía de movimientos y educación a una mecánica efectiva; los términos de calificación negativa indican una distancia mayor del conjunto de semejanzas formales que emplean las personas expertas.

 

Actuación. Si el término forma se usa para describir el proceso de movimiento, el término actuación se usa para indicar el resultado del movimiento. La actuación puede referirse al acto (un niño lanza una pelota) o al resultado (a una distancia de 4,5 m.). En términos absolutos no hay actuación buena o mala, satisfactoria o insatisfactoria. Será relativamente buena o mala en la medida en que se obtenga el resultado esperado. Un salto de altura de 1 m. puede ser una actuación excepcionalmente buena para un niño, pero sería mediocre para un hombre normal, debido a la diferencia de expectativas.

 

Hay una relación causal positiva pero no directa entre forma y actuación. La forma madura tiende a mejorar la actuación, pero la actuación de nivel superior no depende totalmente de la forma madura. Es importante comprender este aspecto de la relación proceso‑resultado sobre todo al aplicarlo a los niños y al desarrollo óptimo de habilidades. Si un niño y un adulto utilizan la forma madura en un lanzamiento a distancia, es evidente que el adulto lanzará a mucha mayor distancia. Si dos niños de igual sexo y edad utilizan la misma forma en el lanzamiento a distancia.

 

Figura Nº 1

Diversas habilidades de lanzamiento y golpe unilaterales en el momento de soltar la pelota o tomar contacto con ella. Los patrones de estas habilidades tienen elementos en común en la acción de las piernas, del tronco, la posición de los brazos y la relación entre el tronco y los brazos es posible que uno lo haga más lejos que el otro. En los casos en que la calidad de la forma es constante y el resultado de la actuación diferente, la diferencia normalmente es atribuible a un grupo de factores denominado capacidades humanas. La fuerza, la velocidad de movimientos, el tiempo de reacción y la coordinación entre la vista y la mano son algunos de los rasgos físicos que están directamente realacionados con la calidad de la actuación. Ciertas capacidades como la velocidad de movimientos (lineal o angular), la fuerza o la integración neuromuscular son factores que influyen decisivamente en la actuación en tareas cuyo resultado se mide en términos de altura, distancia o frecuencia. Otros rasgos tienen una importante influencia en la actuación cuando el resultado buscado es la precisión.

 

Hay otro aspecto de la relación entre forma y actuación, también basado en factores de capacidad, que hay que mencionar de pasada. Se puede ilustrar mediante una situación en la que dos personas tienen el mismo nivel alto de actuación, aunque uno emplea una forma y el otro tiene un defecto pequeño pero detectable en la suya. En este caso se produce una actuación idéntica debido a diferencias en los factores de aptitud. En la persona con la forma defectuosa se dan probablemente todos o parte de los factores de aptitud necesarios para esa habilidad concreta y es capaz de compensar su defecto poniéndolos en práctica. La fuerza podría ser el factor importante de aptitud que permitiera a la persona compensar su separación de la forma buena. Aunque este tipo de compensación pueda tener éxito, el triunfo temporal no es razón suficiente para continuar empleando patrones de habilidades motoras que no sean totalmente eficaces. Para llevar a cabo una actuación óptima debería aplicarse toda la aptitud a la tarea, en vez de utilizarse una parte para superar defectos mínimos en la forma. Es muy importante resaltar los aspectos básicos de la forma buena a la hora de aprender habilidades fundamentales, porque, a la larga, la buena forma produce mejores actuaciones que la forma mala.

 

Habilidad motora fundamental (básica). Las habilidades básicas son actividades motoras normales con patrones específicos. Son habilidades generales que constituyen la base de actividades motoras más avanzadas y específicas, como las deportivas. Correr, saltar, lanzar, coger, correr a gran velocidad, saltar a la cuerda, dar patadas a un balón y escalar son ejemplos típicos de las consideradas actividades motoras generales, incluidas en la categoría de habilidades básicas. Para toda habilidad básica hay un criterio mínimo, más o menos definido, que le confiere especificad, Por ejemplo, el criterio mínimo que define el acto de correr es que los pies avancen alternativamente y que al despegue del pie de apoyo le siga un corto período en el que no haya apoyo. Cuando este criterio se cumple, se ha aprendido la habilidad de correr en el nivel de destreza más sencillo. La forma empleada para llegar al criterio mínimo se denomina forma mínima y su mejora es un proceso gradual hacia la adquisición de la forma madura.

 

Patrón motor maduro. El patrón motor maduro de una habilidad básica es el conjunto de elementos habituales de la forma utilizada por personas expertas. Se ha discutido el uso del término maduro, debido a que implica una referencia exclusiva a los adultos. Sin embargo, en el contexto del desarrollo de patrones motores, maduro quiere decir completamente desarrollado. Los patrones motores maduros se relacionan con la habilidad, no con la edad; son modelos formales que representan niveles de habilidad que pueden alcanzarse en la infancia, pero que quizás no se alcancen ni en éste ni en otro período posterior de la vida. Uno de los patrones motores maduros que muchos adultos no adquieren es el del lanzamiento por encima del hombro, que en general se desarrolla con, lentitud. Si no se ha adquirido hacia el final de la adolescencia, puede que nunca se aprenda, debido a la disminución gradual de oportunidades para progresar.

 

Hay otros términos que se suelen usar para expresar la idea de patrón motor maduro, como patrón fundamental, forma madura, forma buena y forma experta. todos ellos no tienen el mismo significado, pero sí transmiten la idea de un patrón de movimientos que es básico pero muy eficaz.

 

   Patrón motor evolutivo. Patrón motor evolutivo es todo patrón de mo­vimiento utilizado en la ejecución de una habilidad básica que cumple los requisitos mínimos de dicha habilidad, pero que no llega a ser un patrón maduro. según esta definición, todos los patrones evolutivos son relativa­mente inmaduros y no llegan a la forma experta. Se han identificado los rasgos característicos de los patrones evolutivos de la mayor parte de las habilidades básicas. Los cambios en la eficacia de los movimientos y la sin­cronización de patrones evolutivos sucesivos simbolizan el progreso hacia la adquisición de patrones maduros. Se han creado ciertos términos espe­ciales patrón unitario, patrón con dominancia del brazo, rotación en blo­que y apertura que ayudan a describir algunos aspectos específicos de los patrones evolutivos.

 

Patrón unitario. Patrón unitario es aquel en que los movimientos se realizan de modo simultáneo en vez de consecutivo. Muchos de los patrones evolutivos del lanzamiento, el golpe y el salto suelen ser unitarios. Un patrón unitario se convierte en un patrón disociado cuando los movimientos se realizan en secuencias o en series.

 

Patrones con dominancia del brazo. En este tipo de patrones el brazo o los brazos son el principal segmento en movimiento o el segmento que inicia y dirige el movimiento. Si el movimiento principal se circunscribe a los brazos y la parte superior de la columna, el patrón se denomina con mayor precisión, de dominancia superior. Los patrones empleados al lanzar y golpear suelen pertenecer a una de estas dos categorías.

 

Rotación en bloque. La rotación en bloque es un movimiento unitario de todo el tronco: la cadera, la columna vertebral y los hombros giran a la vez, Se produce con frecuencia en los patrones evolutivos del lanzamiento y el golpe.

 

Apertura. Un Patrón motor abierto es aquel en el que las partes del cuerpo se mueven al mismo tiempo en direcciones opuestas. Este importante proceso aumenta el campo del movimiento, es la llave de la acción y contribuye al desarrollo de la velocidad en varias formas de lanzamientos y golpes.

 

Habilidad deportiva. Muchas de las habilidades empleadas en el deporte son versiones mejoradas de la habilidades básicas, que se utilizan de modos concretos. El golpe del Golf es una forma superior de la acción de golpear, el salto en altura es una forma superior del salto combinado con la carrera y el pase del fútbol americano en una forma especial de lanzamiento. La presencia de patrones motores básicos, en su totalidad o en par­te, se pueden detectar en los patrones utilizados en estas habilidades de­portivas.